Desde febrero de 2021 los precios a nivel mundial están sufriendo una importante escalada, y eso está afectando tanto a las empresas como a los consumidores. La reduflación es la estrategia que están usando ya muchos emprendedores para sortear mejor la crisis.
Con una inflación que no deja de crecer, las empresas están en grave riesgo de perder clientes si tienen que subir el precio de sus productos o servicios. ¿Qué se puede hacer entonces?
LA INFLACIÓN COMO ENEMIGA DE LA ECONOMÍA
La inflación se produce cuando hay un desequilibrio entre la oferta y la demanda. En concreto, cuando hay más demanda por parte de los consumidores que oferta de productos o servicios en el mercado.
Esto produce que los precios suban. En consecuencia, los consumidores pierden poder adquisitivo, porque pueden comprar menos bienes con el dinero del que disponen.
LA INFLACIÓN TAMBIÉN ES UNA AMENAZA PARA LAS EMPRESAS
El fenómeno de la inflación afecta a todos los agentes que operan en el mercado, incluídas las empresas. A ellas también les está resultando más caro adquirir los productos, servicios y suministros que necesitan para llevar a cabo su actividad.
Si fabricar resulta más caro, lo normal es que los precios de los productos tengan que subir. Lo cual es un problema, porque una subida de precios puede dar lugar a una pérdida de clientes.
Fuente: Claves de la reduflación: estrategias de los emprendedores para sortear la crisis
