La pandemia de Covid-19 ha acelerado la implementación del trabajo digital. Muchas empresas que antes ni se planteaban el teletrabajo, ahora se han sumado a esta tendencia y lo aplican de manera habitual.
Sin embargo, para que los trabajadores puedan desarrollar sus tareas en remoto, es necesario contar con las herramientas más adecuadas, y eso implica hacer una inversión en nuevas tecnologías.
LA ERA DEL TRABAJO DIGITAL
El teletrabajo era algo infrecuente a principios de 2020. En España siempre se ha primado la presencialidad. Pero esto cambió con la llegada de la pandemia y el confinamiento decretado en marzo de 2020.
La mayoría de las empresas optaron por seguir trabajando en modo remoto, con sus trabajadores cumpliendo con sus obligaciones profesionales desde casa. Pasado lo peor del Covid, todo pareció volver a la normalidad.
EL TELETRABAJO PODRÍA VOLVER PARA QUEDARSE
Desde hace ya algunos meses, la mayoría de las empresas han vuelto a recuperar la presencialidad. De hecho, casi todas siguen prefiriendo esta forma de trabajo, a pesar de que su experiencia con el trabajo remoto no fue negativa.
Sin embargo, esto podría estar a punto de cambiar de nuevo. Con las nuevas medidas de ahorro energético puestas en marcha en Europa, las empresas van a tener que hacer esfuerzos por ahorrar, y algunas de ellas podrían hacerlo volviendo al teletrabajo.
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